El acero negro es una forma de acero no galvanizado. El nombre “acero negro” se debe a la apariencia del acero; tiene un color oscuro en la superficie del acero debido al recubrimiento de óxido de hierro. Este acero es importante en aplicaciones donde no se requiere acero galvanizado. A diferencia de la galvanización, El acero es relativamente frágil al soldar y es fácil de caer y bloquear.

En su forma pura, el acero dulce se oxidará fácilmente debido a la oxidación. A diferencia del óxido de hierro, el cromo metálico al exponerse a la atmósfera forma una capa densa de óxido de cromo que no se cae y, en última instancia, protege el metal subyacente de más ataques de corrosión.

No sería exagerado decir que si miras por la ventana, verás algo hecho con lámina negra. Es el tipo de metal más común que se usa a nuestro alrededor. Desde edificios hasta enormes embarcaciones marítimas, se trata de acero dulce. Algunas de las aplicaciones también incluyen la fabricación de maquinaria y automóviles.